Revisando el disco duro me encontré fotos que tenía pendiente editar de un viaje a Berlín en un mundo pre-covid.
Que a Berlín le sienta muy bien el blanco y negro, es evidente. Que su historia reciente me lleva a pensar en ella con esos tonos monocromos, duros y fríos, también.
Fotos realizadas con la sufrida Panasonic Lumix LX-100, que aguantó vientos de 20 grados bajo cero (pillamos ola de frío en invierno). Como anécdota, tenía muy poco tiempo para poder hacer las fotos, con los guantes no me apañaba (eran muy gruesos) y sin ellos, aguantaba muy poco antes de ver mis manos lilas. La vez que más frío he pasado en mi vida...
Escultura "Madre con el hijo muerto", de Kollwitz. Sobrecoge, está cubierta excepto por el óculo superior para que "sufra" los elementos. Con nieve o lluvia, el efecto que produce impresiona bastante.
Que a Berlín le sienta muy bien el blanco y negro, es evidente. Que su historia reciente me lleva a pensar en ella con esos tonos monocromos, duros y fríos, también.
Fotos realizadas con la sufrida Panasonic Lumix LX-100, que aguantó vientos de 20 grados bajo cero (pillamos ola de frío en invierno). Como anécdota, tenía muy poco tiempo para poder hacer las fotos, con los guantes no me apañaba (eran muy gruesos) y sin ellos, aguantaba muy poco antes de ver mis manos lilas. La vez que más frío he pasado en mi vida...
Escultura "Madre con el hijo muerto", de Kollwitz. Sobrecoge, está cubierta excepto por el óculo superior para que "sufra" los elementos. Con nieve o lluvia, el efecto que produce impresiona bastante.
