Es que hay kilómetros y clima para disfrutarla. Gracias por pasar, @José Viegas.
Algunos, entre los que me incluyo, seguimos sorprendidos de que continúe en pie, pero como tú dices, ahí sigue, inasequible a las máquinas de demolición.
Viendo la belleza de la zona resulta comprensible que la localización resulte apetecible a los intereses inmobiliarios más espurios. Afortunadamente la obra se paró a tiempo y lo que ahora nos resulta difícilmente comprensible es que no se haya devuelto a la naturaleza todo su esplendor con la demolición del edificio y la retirada de los escombros.
