Este salón estaba así, con los maniquíes dispuestos de esta forma, y desnudo de muebles. A mí me vino a la cabeza la tradición judáica de la sala de las almas, lugar donde Dios viste a las almas y les da contenido. Me imaginé el momento en que las almas, ya vestidas por el Creador han partido a su destino, mientras que el salón queda vacío, con los maniquíes que sostenían las vestiduras desnudos.
Sí, ya sé que mis procesos mentales no son muy normales, pero, qué queréis, así lo imaginé, y así os lo muestro.
Sí, ya sé que mis procesos mentales no son muy normales, pero, qué queréis, así lo imaginé, y así os lo muestro.
DSCF4002_HDR by Eduardo Valiente, en Flickr