Una fotografía realmente desconcertante... Casi surrealista diría yo. El mentalista encapuchado, el levitador, esa sombra inquietante en la parte superior izquierda, la pizzeria restaurante apuntando al cielo por encima de un tipo que parece salido de un anuncio asiático de Martini (que, por cierto, reclama más protagonismo que el primer plano).
Compositivamente tal vez sea un poco caótica, pero me fascina el resultado.