En una ruta motera, este verano pasamos casualmente por Anento justo el fin de semana en que se celebraban las jornadas medievales. La suerte es que llevaba la cámara encima. La mala suerte es que era mediodía (con el sol cayendo de plano) y que las actividades no continuarían hasta las 5 de la tarde por lo que todos "los figurantes" se encontraban comiendo o descansando. A pesar de todo, en esta serie hay un par de fotografías que me gustan. A ver qué opinais.
Saludos
Saludos