Hola, me gusta la toma y me gusta el procesado, esas luces y brillos de los elementos metálicos han quedado realmente bien.
No obstante, para mi gusto, hay alguna cosa que no termina de gustarme y es que, desde mi modesta opinión, la fuerza de algunas tomas radica en la simetría o, si lo prefieres, una simetría debe ser casi perfecta, aunque no sea el fin que se pretende.
En ese sentido yo recortaría un pelín por la derecha (manteniendo el alto), sacrificando esa lámpara de pie que está en una zona más iluminada y casi compite en atención con la puerta.
Haber pillado a ese señor (supongo que el portero) en el centro del círculo habría sido redondo, pero sé que eso es algo que se ve muy fácil ahora y nunca nos percatamos (el primero yo) en el momento de la toma, cuando lo único que nos preocupa es que no se nos escape.
Disculpa por el rollo y, a pesar de todo, vuelvo a decir que me gusta.
Un saludo.