Creo que lo que viene a decir pixel-depot es que la GFX permite obtener fotos más acabadas en cámara. ¿Sí?
Sin variar ninguno de los parámetros ajustables en cámara (especialmente, el detalle) encuentro que los originales que ofrece la GFX 50S apenas necesitan ajustes posteriores, incluso si se dispara en JPEG. Sé que ahora más de uno pensará: "claro, con 50 Megapíxeles… Así cualquiera!"
Pues no, no se trata de los 50 MP, porque tanto en la Canon EOS 5DS R, como con la Hasselblad H5D-50 necesité –por ejemplo– aplicar máscara de enfoque (52% / 2 / 4 ) para conseguir ese
plus de foco que todas las cámaras necesitan. Bueno, no todas… porque me encuentro en la misma situación con la X100F.
Quiero reiterar la importancia de no aplicar máscara de enfoque en las fotografías que ilustran la prueba. Los recortes al 100% muestran un detalle que –hasta ahora– no he conseguido con ninguna cámara, incluidas las Hasselblad que he probado (series H3, H4 y H5). Por suave que fuera la máscara de enfoque (incluso probé a un 20%) ese toque extra de foco sobraba en la foto y mostraba un aspecto irreal de la fotografía.
Uno de los aspectos fundamentales a la hora de hacer fotos (no de disparar, que por desgracia eso es lo que veo desde que llegó la tecnología digital) es iluminar bien y medir bien la luz. Por más perfectos que sea la fotometría, siempre debe haber una aportación del fotógrafo, para compensar la diferencia de luces entre altas luces y sombras. De ahí la importancia del fotómetro, que sigo utilizando y del que me fío más que de las pantallas LCD e histogramas.
En mi opinión, la GFX 50S ofrece capturas muy ricas en detalle y fidelidad cromática. Por supuesto que el precio es elevado y que –por desgracia– está al alcance de muy pocos bolsillos, pero es una cámara que te enamora más y más a medida que vas trabajando con ella. El manejo no dista mucho del de una SLR full frame, si bien hay aspectos que deberían mejorar mucho para considerarla una cámara perfecta, como el visor.
Salu2