A finales del pasado mes de Junio tuvo lugar la 20ª edición de la ya consolidada 080 Barcelona Fashion Week, pasarela de moda donde se dan cita varias marcas nacionales reconocidas. Allí pude fotografiar el backstage de la marca de ropa de baño ‘Guillermina Baeza’, en el que había modelos consolidadas como la canaria Joana Sanz, Dalianah Akerion o la top bielorrusa Zhenya Katava.
El equipo usado fue una Fujifilm X-T1, Fujinon 23mm F2 R WR, Fujinon 50mm F2 R WR y el flash Nissin i40.
[asa2_collection tplid=»4″]3[/asa2_collection]
Sobra decir que fotografíar entre bambalinas de un desfile de moda es algo bastante diferente a hacerlo ante la pasarela. Cuando las modelos desfilan, hay un encorsetamiento considerable, tanto por el papel que desempeñan en la pasarela como por la fotografía en si misma, donde los parámetros técnicos deben ser muy precisos y no hay apenas opción para realizar algo diferente o creativo.
Sin embargo, detrás de la pasarela, en el llamado «Backstage», todo cambia. En la sala de maquillaje las modelos están relajadas, hay buen ambiente, pueden ser espontáneas, pueden fijar su mirada en el objetivo tranquilamente, o estar pendientes del smartphone. En otras palabras, están siendo ellas mismas, y eso en las fotos se nota. La iluminación es muy agradecida, y sobretodo, hay tiempo para pensar la foto y encuadrar. El propio material de maquillaje, así como los maquilladores, también pueden ser protagonistas, y se pueden tomar fotos muy atractivas del trabajo de los maquilladores, así como fotos de detalle del proceso de maquillaje. Son momentos en que las modelos están casi inmóviles, y eso es una ventaja para el fotógrafo.
Una vez pasan por maquillaje y peluquería, llega el momento previo al desfile, donde se ponen la ropa que lucirán en la pasarela, desfilan, y vuelven a cambiarse para volver a desfilar. Aquí se produce un cambio significativo, todo es más frenético, la tensión es constante, y la iluminación es más bien escasa o muy variable. Esto supone un reto a nivel fotográfico, ya que a parte de poner a prueba nuestra cámara con el flash, los niveles de ISO y el autofocus, hay que poner toda la atención para que no se escape ni un detalle: últimos retoques de maquillaje, repaso del estilismo para que esté todo perfecto, carreras para cambiarse la ropa y llegar a tiempo siguiente turno, control preciso del «timing» para salir a desfilar… no hay tanto tiempo para pensar la foto, pero como resultado se obtienen unas fotos con un aire más dinámico.
Se suele decir que las mejores fotos de una sesión de moda son aquellas que se hacen mientras la modelo no se da cuenta. Creo que esto también podría ser extensible a la pasarela y el backstage en un desfile de moda.
Buenas fotos Enric
Muchas gracias! Y gracias a Jon y a Fujistas por el feedback, un placer como siempre