Seguro que muchos os habéis preguntado cómo son las tripas de una Fujifilm GFX 100, la joya del formato med… errr… gran formato digital de la marca. Los chicos de LensRental van a calmar vuestras ansias ya que han realizado una autopsia a esta cámara de 11.000€. Y han ilustrado con todo lujo de detalles este proceso.
¿A quién en su sano juicio se le ocurriría semejante sacrilegio sin tener a millones de seguidores en Youtube para reírles (y viralizarles) las tonterías? En realidad, la GFX 100 había dejado de funcionar por la filtración de agua marina entre las juntas de sus diales superiores y el «destripe» permitiría recuperar los componentes intactos de la cámara. En el artículo hablan de que al cliente que alquiló el equipo se le coló algo de agua a través de la carcasa submarina con la que había utilizado la GFX 100. Las circunstancias reales de su uso -y si fueron razonables- nunca las sabremos, pero el crujano jefe de LensRental se atreve con una conclusión muy reveladora:
Me fijé en algunas partes abiertas alrededor de los diales de control por donde podría colarse la luz y por donde podría filtrarse agua si cayese por la zona.
[…] Más allá de este hecho, todo en la cámara estaba bien ensamblado y tan robusto como podrías esperar. El dispositivo IBIS tiene pinta de ser capaz de estabilizar hasta a un niño pequeño y realmente es suficientemente fuerte como para funcionar con este sensor grande. Me quedé con un bonito sensor para decorar mi escritorio, y el departamento de reparaciones se llevó algunos muelles y partes estruturales, probablemente también una pantalla LCD para arreglar unidades que puedan dañarse en el futuro.
Personalmente, creo que nunca expondría una cámara como la GFX 100 a algo más que las salpicaduras de una lluvia leve…
Podéis ver todas las fotos del desmontaje de la Fujifilm GFX 100 y el resto de la historia en esta entrada de LensRental. Otras historias de desmontajes de equipo fotográfico de la Serie X en Fujistas.