Una de las cosas que me encantan de Fuji (además de la estética de sus cámaras y el disfrute que proporciona su forma de manejo), son los fantásticos colores que consiguen sus sensores sin apenas trabajo durante la edición. En mi reciente viaje a Sudáfrica lo corroboré una vez más mientras fotografiaba en la Reserva Natural de Madikwe (región de North West, en la frontera con Botsuana y no muy lejos del desierto de Kalahari).
La luz del atardecer y el amanecer en la sabana sudafricana regala unos colores mágicos que convierten la experiencia de recorrer este territorio en un recuerdo repleto de estampas imborrables. Os dejo algunas tomas, las dos primeras realizadas el mismo día al atardecer, con una X-T4 y el modesto XC50-230mm (un objetivo en mi opinión poco reconocido, a pesar de su imbatible relación calidad-precio), y las dos últimas tomadas al amanecer, la primera con la misma combinación anterior, y la segunda con una X100V. Espero que os gusten.
		
		
	
	
		 
	
		 
	
		 
	
		 
	
	
		
			
		
		
	
				
			La luz del atardecer y el amanecer en la sabana sudafricana regala unos colores mágicos que convierten la experiencia de recorrer este territorio en un recuerdo repleto de estampas imborrables. Os dejo algunas tomas, las dos primeras realizadas el mismo día al atardecer, con una X-T4 y el modesto XC50-230mm (un objetivo en mi opinión poco reconocido, a pesar de su imbatible relación calidad-precio), y las dos últimas tomadas al amanecer, la primera con la misma combinación anterior, y la segunda con una X100V. Espero que os gusten.
 
	 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		
 
 
		 
 
		 
 
		 En otra ocasión acabó completamente cubierta de polvo de extintor, durante otro espectáculo que casi acaba mal (aquí he de reconocer que pensé que tenía que tirar la cámara a la basura), pero tras limpiarla exteriormente con cuidado no sufrió el menor contratiempo.
 En otra ocasión acabó completamente cubierta de polvo de extintor, durante otro espectáculo que casi acaba mal (aquí he de reconocer que pensé que tenía que tirar la cámara a la basura), pero tras limpiarla exteriormente con cuidado no sufrió el menor contratiempo. 
 
		 
 
		
 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		 
 
		