Se trata de vender y el qué no importa o importa menos. En el caso de los fuets no sé cómo serán, si buenos o no, típicos o no, "exportables" o no. En el caso de las camisetas (y de las pulseras), llevamos viendo las mismas en todo tiempo y lugar, desde hace, por lo menos, veinte años. Tienen ya más solera y tradición que el fuet.
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Nunca he estado en Vic, tendré que probar los de allí. Los de la foto, en Peñíscola, tampoco los he probado y no pasé pena por ello. En cuanto a la foto, la pillé de camino, en bajada, buscando la sombra y aprovechando un momento de poco tránsito por esa placita.
