Fuji X-T1: primeras impresiones y análisis en Fujistas

Fujifilm parece que se ha metido en un buen lío con esta Fuji X-T1. Ha anunciado un modelo que se antoja mucho más «pro» que la Fuji X-Pro1 pero que, en cuestión de gama y precios, se sitúa a medio camino entre la  Fuji X-E2 y la ya derrocada reina de la serie X. Ahora mismo la Fuji X-Pro1 sólo destaca por la exclusividad de su visor óptico. En los demás campos como la velocidad de autoenfoque, resolución de visor y pantalla LCD, disponibilidad de controles físicos y rendimiento general, es literalmente barrida por la Fuji X-T1. La gran incógnita ahora será ver la nueva vuelta de tuerca que Fujifilm prepara para la X-Pro2 para volver a convertir esta línea en el buque insignia y solucionar esta bicefalia. Mientras tanto, la X-T1 se convierte en el nuevo objeto de deseo de la serie X.

Presentación Fuji X-T1

La secretísima presentación tuvo lugar en la antigua fábrica de cerveza Moritz de Barcelona. Muchos peces gordos de la fotografía ansiosos por meter mano al nuevo bicho y muy pocas unidades disponibles. Por suerte, el X-Photographer Ignasi Raventós pudo hacerse con una cámara y nos acompañó a J. G. Damlow de FujiXperience (cuyos análisis os recomiendo leer en su blog)  y a un humilde redactor fujista  en una rápida visita a los alrededores del MACBA, en la que tuvimos la oportunidad de probar con más tranquilidad las virtudes de la Fuji X-T1. Por fin la podíamos ver de cerca.

Es de esperar que la cuestión estética divida a muchos fujistas pero, personalmente, creo que Fujifilm ha sido valiente al desprenderse de los corsés de las líneas de diseño de cámara telemétrica. La construcción de esta Fuji X-T1 se asemeja al de cámaras réflex clásicas, con un visor central alineado al eje de la lente, lo cual puede resultar más atractivo para potenciales fujistas emigrados desde el mundo DSLR. Este diseño además permite ser menos espartano en cuanto al uso de diales de control y, así, nos encontramos nada más y nada menos que con 5 diales en la parte superior de la cámara dedicados  a la velocidad del obturación, compensación de la exposición, sensibilidad ISO, modos de medición de luz y  de cadencia de ráfaga. Se trata del primer foco de satisfacción  a la hora de coger la cámara: la sensación de poder y control que te da el ajustar y comprobar físicamente los parámetros de disparo sin depender de menús ni paneles indicativos.

Fuji X-T1 frente

El primer agarre de la Fuji X-T1 es muy satisfactorio ya que da más sensación de robustez que mi  Fuji X-E1, sin ser apreciablemente más pesada. Su equilibrio de peso con el objetivo Fujinon XF 18-55mm R LM OIS es total y el tamaño es similar a la línea X-E. En cambio, su diseño «a la réflex» cuenta con una empuñadura mucho más pronunciada que ayuda a la estabilidad a la hora de disparar en tomas con velocidad de obturación lentas. A mí particularmente me ha encantado esa posibilidad de agarrar con fuerza la cámara, es algo que echo de menos en una «mirrorless» de tamaño medio-grande como puede ser la X-Pro1 y una característica que seguro que será bienvenida por muchos usuarios que pedían algo «más grande» en la serie X. Muy posiblemente esa petición de mayor tamaño quede resuelta con la sensación que ofrece esta empuñadura y la solidez que transmite la construcción de aleación de magnesio del cuerpo.

Hace pocos meses hablaba de las bondades del visor electrónico de la Fuji X-E2, con la que pensaba de manera ingenua que se había tocado techo, o al menos no imaginaba un visor que pudiese ofrecer una funcionalidad mucho más destacada. Fujifilm ha vuelto a demostrar que estaba equivocado: si con la Fuji X-E2 se demostraba que con su visor no teníamos porqué echar de menos el visor óptico de las réflex, con la Fuji X-T1 nos encontramos que, delante de un visor réflex decente, tenemos razones para echar de menos el visor de la X-T1. Así de rotundo. Con un 0,77x de amplificación y 2,36 megapíxeles de resolución, este visor se nos aparece enorme, sobre todo si tenemos activado el modo de visualización completo que aprovecha toda la superficie del panel para mostrar la imagen. Pero lo que realmente determina su calidad es su impresionante tasa de refresco. Incluso en las situaciones más oscuras, por mucho que girase sobre mí mismo, era imposible de ver un atisbo de retraso entre lo que había delante de mis narices y lo que se refleja en el visor. Visor de tiempo real lo llaman, y no exageran un pelo.

Principio y final de la ráfaga con la fuji X-T1
Principio y final de la ráfaga con la fuji X-T1
Recorte del autoenfoque por seguimiento de la Fuji X-T1
Recorte del autoenfoque por seguimiento de la Fuji X-T1

Quedaba comprobar el tema del autoenfoque, con unas cifras de rendimiento en el papel similares a la Fuji X-E2. Pero en la práctica me he llevado una sorpresa. Y no se trata de ese punto de ráfaga extra que nos permite alcanzar los 8 fotogramas por segundo, tiene que ver con el seguimiento del autoenfoque (AF Tracking). Lo reconozco, no soy un fotógrafo de acción y quizá por ello mi anterior prueba de la Fuji X-E2 en este campo no haya sido satisfactoria al 100%. Pero con la Fuji X-T1, con una buena iluminación eso sí, ha habido un porcentaje pequeño de errores en la media docena de ráfagas a sujetos en movimiento que intenté tirar. ¿Similar a mi antigua Canon EOS 50D? Tendría que hacer pruebas más extensas. Ahora sólo me acuerdo de la legión de malas críticas al autoenfoque de la Fuji X-Pro1 antes de que llegaran las primeras actualizaciones de firmware, me doy cuenta de que apenas han pasado dos años y la diferencia es tremebunda. Lo mismo se puede decir con el rendimiento de la X-T1 a la hora de hacer ráfagas y recuperarse para la siguiente toma: tres segundos de «clics» constantes, ni rastro de fatiga y enseguida lista para la siguiente acción. Las comparaciones son odiosas y no dejo de mirar de reojo a mi Fuji X-E1… La última prueba de autoenfoque que realicé consistió en calzar a la Fuji X-T1 con el Fujinon XF 60mm f/2.4 R , el objetivo más «difícil» de la serie X. E intentar trabajar con el en condiciones difíciles de luz. Otra vez vuelve la sorpresa y maravillado veo como el enfoque se vuelve tres veces más rápido y las dudas que había en la Fuji X-E1 desaparecen. Impresionante.

En poco más de veinte minutos de uso resultaba realmente difícil probar otras características de la cámara en profundidad. Pude disfrutar con la magnífica pantalla LCD abatible, una característica muy devaluada entre las cámaras de gama alta pero que tiene su especial utilidad para pasar desapercibido en la fotografía de calle. Pero no pude llegar a aprovechar la extrema personalización que permiten sus seis botones configurables ni comprobar su nueva y útil funcionalidad de disparo remoto. Esos y otros muchos más detalles son historias que serán contadas en otra ocasión… Esperemos que pronto.

Jon Díez Supat
Jon Díez Supat
Friki fotográfico, jefazo y becario en Fujistas

12 COMENTARIOS

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12 Comments
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Francisco Manigrasso
28 enero, 2014 18:34

Buen artículo e interesante cámara. Sin duda la echaré un vistazo en persona en cuanto pueda.

Lex Arias
28 enero, 2014 20:39

Debo decir que Fuji esta haciendo las cosas como deberían hacerse… hay dos marcas que creo tendrán mucho que aprender al respecto… bien por Fuji… por mi cuenta, ya estoy reuniendo para esta cámara…

Kynamuia
28 enero, 2014 23:25

Cuanto más la miro más me gusta. Está plagada de diales y mandos directos y es una pena que ese 16-55mm f2.8 estanco venidero no se ofrezca en kit en el lanzamiento, habrá que esperar, pero parece el compañero todoterreno ideal para esa cámara. Gracias por el artículo, creo que nos ha puesto los dientes largos a más de uno. Un saludo.

Jon Díez
29 enero, 2014 09:43
Reply to  Kynamuia

Es el único pero que se me ocurre para esta cámara: que no haya un kit de lente sellada desde su lanzamiento. Los interesados en tener un equipo completamente protegido contra inclemencias meteorológicas deberán esperar hasta junio y eso puede ser demasiado tiempo de espera.

Javier Piñeiro
29 enero, 2014 10:38

Buen artículo! Gracias Jon!!

Diego Jambrina
29 enero, 2014 18:49

Yo hubiera preferido un diseño menos réflex y más telemétrica, como se define aquí, aunque me gusta su aspecto, y mucho.

Manuel
Manuel
29 enero, 2014 22:54
Reply to  Diego Jambrina

Totalmente de acuerdo con el compañero Diego Jambrina, a mí un diseño reflex no me llama en absoluto la atención, es como si con un diseño así los más neófitos fueran a comprar la nueva cámara pensando que solo por el diseño va a ser más capaz, o eso es lo primero que me ha venido a la mente…

El tema de los diales y controles en general me parece resuelto de manera sobresaliente, un diez por Fuji. Ahora, lo que de verdad haría que nunca jamás comprara esta cámara más que como segundo cuerpo es la ausencia de visor óptico, ya pueden haber mejorado lo que quieran el electrónico, pero personalmente creo que un visor óptico es muy superior y te ofrece unas sensaciones insuperables al fotografiar.

Saludos,

Jon Díez
30 enero, 2014 12:10
Reply to  Manuel

Me alegro mucho que haya opiniones discordantes, Manuel. Tu incides en lo que a ti te importa de tus necesidades fotográficas: un visor óptico «puro» y un diseño más telemétrico que me imagino te inspirará más, y en esa dirección Fujifilm va a seguir trabajando con otras líneas.

En mi opinión, me gusta más la estética de una X-Pro1 pero la X-T1 me resulta más funcional. Y me parece que es mucho decir que la X-T1 es para atraer a «los tontos de las réflex»: su punto fuerte son la profusión de diales, algo que me parece más difícil de lograr con un diseño de visor a un lado. Hay incluso diales dobles, que en un cuerpo «a la telemétrica» sobresaldrían demasiado. Pero con este diseño van a un tamaño perfecto.

Lo del visor óptico, estoy sólo parcialmente de acuerdo. Siempre preferiré un visor óptico puro de cámara réflex. Pero esto implica un espejo y mucho mayor grosor de cámara, algo que he dejado atrás con la serie X de Fujifilm. Yo estoy enamorado del visor óptico de mi X100, pero hay muchas situaciones en el que error de paralaje me impide usarlo y acabo tirando de electrónico, al que me he habituado como mal menor. Eso sí, ese visor electrónico de la X100, comparado con la X-T1, es la noche y el día. Yo te invito, Manuel, a que lo pruebes en cuando tengas ocasión: posiblemente te lleves una grata sorpresa.

edcarsi
31 enero, 2014 08:41

Jon, estoy muy de acuerdo contigo por lo que comentas y es por eso que estoy en espera de la X-Pro2, esperando que no se quede en rumores y prontamente ya la tengamos con las prestaciones que se están mencionando y mas, seria una gran cámara, saludos a todos …

Pedro
Pedro
20 marzo, 2014 16:47

Alguien sabe si con el grip montado mantiene la protección contra agua y polvo.

Jon Díez
21 marzo, 2014 08:18
Reply to  Pedro

Sí que la mantiene. La cuestión es que todavía no está disponible en el mercado ninguna de las lentes selladas que Fujifilm publicó en su hoja de ruta para este año. Hay que esperar para tener un conjunto completamente protegido contra las inclemencias meteorológicas.

pedroterrades
5 febrero, 2015 17:52

No consigo utilizar el flash externo EF-X8 con la fuji X-T1 sigo las instrucciones del manual pero ni siquiera consigo resaltarlo en el menú para su configuración.
Alguien sabe como hacerlo?