No te engañes. O engáñate si quieres.
Pero si no fuera por el software, la ingeniería o, si prefieres simplificar, la dichosa iA, no verías el “milagro” que ves.
Los milagros, en Lourdes.
Y si se te quitan las ganas, no te apures. Dale gusto a la desgana.
Yo es que siempre que leo este tipo de planteamientos, o supuestas dudas, no sé cómo llamarlo (llevo unos cuantos años viendo post parecidos) no puedo evitar pensar lo mismo: “¿pero cuál será el problema?. Si tanto les convence, si les sirve tan bien, si les hace replantearse las cosas… ¿por qué no?
Este afán comparativo…
No sé.
Ca uno es ca uno, está claro.
Y se entretiene como le gusta, faltaría más.
Pero, es como si tuvieran una revelación y creyeran que el resto del mundo necesita conocerlo (“como sí”, insisto, sólo es una forma de hablar)
Y si alguien deduce de esta -sólo una más, la mía- humilde opinión que uno está en contra de, o niega la utilidad de los avances, pues… se equivoca. O le falla la comprensión escrita.
Son pensamientos personales “en voz alta”, nada más (y nada menos)