Bien, vamos por partes:
La nitidez y la resolución de las ópticas Leica suele ser de campanillas. Apostaría a que los técnicos de la marca no les parecen chorradas. De hecho es lo que puede aportar "realismo", en tanto ayuda a reproducir con fidelidad el sujeto fotografiado. Lo de la capacidad de dibujar con luz, ¿cómo se mide? ¿Por intuición? ¿Por algún don? Suena un poco esotérico, no sé...
Por supuesto que no les parecen chorradas. Por eso las ópticas Leica están entre las mejores que existen. Pero no se quedan ahí, como Fuji o Nikon o Canon. Precisamente por eso van un paso más allá. No solo por la capacidad resolutiva o el microcontraste, sino por la tridimensionalidad de las imágenes. En eso influyen el número de palas del diafragma, su forma, el propio sistema telemétrico en sí mismo, el propio diseño de las lentes,... son muchos factores. Son objetivos casi perfectos porque no se ciñen a sobresalir en uno o dos parámetros de laboratorio, como el resto de marcas más mundanas, sino en todos. Por eso cuestan lo que cuestan. Hacer un 50/F0.95 que además tenga una capacidad resolutiva brutal a la par de esa capacidad de separar sujeto y fondo de una forma única incluso a aperturas cerradas (F2.8, F4) no es fácil ni barato. Los chinos te lo copian, pero o bien no tienen esa definición, o bien no tienen el look de las ópticas Leica (o ninguno de los dos).
La capacidad de "dibujar con luz" no se mide, pero se puede percibir e identificar. Yo mismo he hecho la prueba y la gente te dice "tiene algo que no sé qué es, pero hace la fotografía más real". Ese rollo tridimensional no lo da una óptica Fuji de las modernas, ni Nikon, ni tampoco Canon. Alguna óptica antigua de Nikon sí es capaz de "redenderizar" de la misma forma, pero siguen quedándose atrás, porque es en el apartado resolutivo donde no llegan. Hablo de Nikon porque he tenido prácticamente todos los objetivos AF que existen para esa marca y bastantes AI. Los conozco bien.
Las ópticas Leica sufren, si no, algo equiparable al rechazo al transplante, ¿no?
Las ópticas Leica sufren lo mismo que el resto de objetivos de otras marcas que se montan en una montura que no es la suya. De pérdida de calidad y/o características que sí resaltan cuando están en el sistema para que fueron diseñadas. Esto se aprecia sobre todo cuando el "salto" entre monturas es además entre sistemas, por ejemplo, una óptica para réflex en un cuerpo Leica M.
¿Qué ópticas Zeiss? ¿Las que usaban las Contax telemétricas? ¿Las de montura Contax/Yashica? ¿Las actuales? ¿Qué ópticas Voigtländer? ¿Las de las Prominent? ¿Las fabricadas por Cosina?
Me refiero a las Zeiss para Leica M, claro, que es de lo que estamos hablando. Se acercan, pero tampoco son lo mismo. La línea Otus yo sí diría que es equiparable, aun siendo distinto sistema, por poner otro ejemplo.
Oskar Barnack falleció mucho antes de que apareciera la primera Leica M. Y no inventó la película de 35mm, sino que la tomó prestada del cine. Parece que su afición al excursionismo y el deseo de disponer de un equipo lo más ligero posible lo llevaron a diseñar la primera cámara de 35mm, más que el intento de emular la tridimensionalidad de nada. El negativo de 35mm es una cosa y el Full Frame es otra.
Gracias por la corrección. He mezclado información hablando de memoria. Efectivamente Barnack no diseñó el sistema M, que es unos 30 años posterior a las Leica que diseñó él (esto sí lo sabía pero mi comentario lleva totalmente a la confusión). Lo que sí hizo (o al menos así lo entendí yo) fue extender el formato cinematográfico de 18x24mm (¡parecido al APSC!) a 24x35mm. De ahí el "inventó" pero efectivamente no es el inventor como tal de la película, sino de la inclusión del formato en cámaras fotográficas, que es una cosa diferente.
Y las Leica M sí pretendían emular (y consiguen) la tridimensionalidad de las cámaras de formatos más grandes. Esto lo leí en un artículo muy extenso sobre el sistema M que ahora no consigo encontrar. De todas maneras, ya lo he explicado en mi primera contestación.
Y sí, el negativo de 35mm y el FF son cosas diferentes. Uno es película fotográfica y el otro es un sensor digital. Comparten dimensiones. En eso estamos de acuerdo, supongo. Meterlos en el mismo saco es por simplificar, nada más.
Hay quien usando Leica analógica durante años y años ha preferido otros sistemas digitales. Sebastião Salgado, por ejemplo.
Sí claro, nadie está obligado a seguir en un sistema de por vida. Hay intereses de diversos tipos, como comerciales, espónsor, por el gusto de cambiar simplemente... Ahora McCurry, después de 4 décadas con Nikon, se ha pasado a Leica. ¿Y qué?
No hay que denostar con agresividad o desprecio a nada... ni tampoco tampoco a nadie.
¡Salud!
Estamos de acuerdo.
Saludos.