malojo
Fujista de renombre
En ese año me propuse pasar de una Werlisa Color que me regalaron en el 74 a mi primera reflex. Quería una con un 50 mm., pero lo único que me podía permitir era la Konica Autoreflex TC, que era la mas barata y costaba 20.900 ptas, pero esa oferta era con el 40/1.8, porque si no, tenía que comprar el cuerpo + el 50/1.7, y eso se me iba de precio, así que con el 40 me quedé y empecé a tirar carretes, pero seguía queriendo un 50, y casi un año después me encuentro uno bien de precio, así que lo pillo, arrinconó el 40 y a tirar fotos con el 50, pero no sé qué me pasaba que no me hallaba, así que pensé que mi lente perfecta tendría que ser... ¡¡un 35!!, con tan buena suerte que al poco me sale un 35/2 impecable, se lo sueldo a la càmara y a quemar carretes.
Pero tampoco me sentía cómodo con él, un amigo me dice que tiene también una Konica y que buscaba un 35, se lo vendí y volví al 50 y tras varios meses y muchos carretes volví a la vieja impresión de no estar agusto, y entonces me acuerdo del 40, que llevaba más de un año en la caja de la cámara, y sin mucha fé se lo encasquetó y me puse a tirar fotos y entonces y sin ser consciente de ello, no echaba nada de menos, no cuestionaba ni pensaba en cambiar de lente, porque me encontraba en paz y agusto.
El 50 también me lo compró mi otro amigo, así
que tras un año y medio de fotos a disgusto con el 35/50 y con la pasta que palmé con los cambalaches, aprendí que el 40 era mi ojo.
Que complicados somos algunos humanos.
Saludos.