Lo estábamos pidiendo a gritos. El Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR viene a jubilar a su venerable predecesor de idéntica distancia focal y luminosidad, añadiendo calidad de imagen, mayor velocidad de autoenfoque y un sellado contra inclemencias meteorológicas.
Todo sistema fotográfico ha de tener un 35mm equivalente (a formato completo) capaz de exprimir las cámaras modernas y que dé garantías para cubrir las necesidades de los fotorreporteros, documentalistas y fotógrafos callejeros con aspiraciones más serias. Puedo decir que la Serie X de Fujifilm lo tiene por fin.
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Máxima calidad para una focal todo-terreno
La distancia focal de 23mm en APS-C es mi favorita, la que siento mucho más cercana a la visión natural al tener un ángulo de visión menos comprimido que el 35mm (50mm equivalente en full frame) denominado mayoritariamente como “distancia focal estándar”. Somos multitud los fujistas que la consideramos la distancia focal todo-terreno, al ser lo suficiente angular para abarcar escenarios amplios pero quedándose en el punto justo para evitar deformaciones de perspectiva en rostros, cuerpos, líneas y edificios.
He tenido durante muchos años el primigenio Fujinon XF 23mm F1.4 R y casi la mitad de las fotos de mi catálogo están tomadas con esta óptica. Me tuve que deshacer de él hace algo más de un año y mientras tanto he disfrutado del Viltrox 23mm F1.4 con la conciencia tranquila de estar utilizando un cristal de gran relación calidad / precio. Para la máxima portabilidad también tengo el Fujinon XF 23mmm F2 que le doy uso básicamente en escenarios viajeros o callejeros. El desenlace final ha sido probar el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR y, a pesar de creerme a salvo del G.A.S., ahora me es imposible evitar pensar en una nueva adquisición en esta focal.
Dar mi opinión sobre el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR me genera un problema: es difícil verle defectos para señalarlos con el dedo y justificar mi análisis más allá de decir que «este objetivo es excelente». De verdad, como aspectos menos buenos del objetivo sólo puedo mencionar su tamaño y su precio, cuestiones que creo que están bastante disculpadas en base a las prestaciones que te ofrece. En el extremo positivo están una construcción impecable, el autoenfoque más fiable de la cristalería Fujinon y una calidad de imagen con un listón difícil de superar.
Esquema óptico y calidad de imagen
El Fujinon XF23mm F1.4 R LM WR tiene una construcción óptica de 15 elementos repartidos en 10 grupos, entre los que hay que destacar dos elementos asféricos y tres elementos de dispersión extra baja (ED). Estas lentes especiales se incluyen para reducir las aberraciones cromáticas y asféricas y cromáticas, así como para aumentar la nitidez en todo el encuadre. El grupo óptico de 6 lentes en el centro del objetivo tiene un diseño de lentes tiene un diseño simétrico convexo-cóncavo frente cóncavo-convexo que, según los ingenieros Fujinon, es clave para reducir las aberraciones a su mínima expresión.
💡 Fujifilm resalta la coordinación del grupo de elementos encargado de fijar la distancia de enfoque y el grupo de lentes trasero con la lente ED. Su diseño sincronizado permite aumentar la nitidez, así como combatir la fluctuación de aberraciones cromáticas y asféricas en todo el rango de distancia de enfoque, desde la distancia mínima hasta el infinito.
A vueltas con la nitidez
Lo que realmente importa de este tipo de objetivos luminosos es que rindan con el diafragma completamente abierto. Y el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR rinde de una manera pasmosa desde el centro hasta los bordes, exprimiendo al máximo al captor de mi X-T30.
No hay punto dulce concreto, todo el rango de diafragmas es más empalagoso que un panal de miel. El objetivo captura siempre la máxima resolución de esquina a esquina. Punto. No pienses en una u otra abertura para arañar más detalle a tu sensor de 26 megapíxeles. Simplemente elige una abertura de diafragma con la profundidad de campo y las necesidades de velocidad de obturación en mente, que la variable de nitidez -al menos hasta que llegue la Fuji X-H2– deja de ser algo a considerar.
Me cuesta recordar algo así en la montura X: con este objetivo apenas hay diferencia en la magnífica resolución desde F1.4 a F8 en el centro de la imagen. Podemos decir lo mismo de los bordes de la fotografía. Ya si nos ponemos a mirar esquinas extremas con lupa, a f/1.4 observamos un ligero emborronamiento de los detalles que a f/2 ha desaparecido. A f/5.6 la resolución en las esquinas, liberadas de viñeteo, alcanza el sobresaliente.
Distancia mínima de enfoque
El objetivo tiene una distancia mínima de enfoque de 19 centímetros y una magnificación macro de 1:5. Más que suficiente para la mayoría de fotos de aproximación que queramos hacer.
Resistencia a los reflejos no deseados
Todo el mundo te dirá que la nitidez del Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR es excelente, la crème de la crème. No les falta razón. No obstante, no es lo que más me maravilla de las prestaciones ópticas del objetivo. Yo personalmente destaco el contraste perfecto que es capaz de mantener con luz solar fuerte entrando en el sensor desde cualquier dirección. Esta es, en mi opinión, la mejora más diferenciadora que aporta este nuevo modelo frente a todo lo existente hasta ahora con esta focal.
Mi hijo y yo tenemos un rincón mágico en el lugar que vivimos. En el pueblo lo llaman el árbol del amor, aunque nosotros hemos cambiado a una denominación más aventurera como es el árbol de la bruja. En las últimos años he probado a tomar fotos varios objetivos a contraluz, al caer el sol sobre el horizonte mientras interactuamos con la hermosa haya. Literalmente, he alucinado con el Fujinon XF 23mm F1.4 R WR: el contraste es buenísimo y sólo se resiente con los contraluces más frontales, pero de una forma completamente natural a la escena y poniendo fácil la improbable necesidad de edición para eliminar la mínima neblina.
En cuanto a los destellos y reflejos de luz no deseados, he tenido que forzar al máximo los encuadres para encontrarlos. Apenas me han aparecido ni en el centro ni los laterales, a pesar de que siempre hay un ángulo puñetero que te saca el flare que arruina la fotografía. En ocasiones me parecía ver algún destello no deseado en el visor pero al buscarlo en la pantalla del ordenador, ¡oh, sorpresa! va y desaparece. De mi penúltima salida, te reto a que busques el reflejo no deseado pinchando en la foto para ampliarla al máximo que permite la web:
Aberraciones cromáticas al mínimo
Una de las virtudes destacadas del Fujinon XF 23 F1.4 WR R LM WR frente a sus competidores es la ausencia de aberraciones cromáticas en las imágenes capturadas por sus lentes. No nos engañemos: haberlas, haylas…. Pero hay que buscarlas. Si nos limitamos a las aberraciones cromáticas laterales, no hay. Cero.
Las aberraciones cromáticas axiales, esas que aparecen en los desenfoques con luces contrastadas y que son más difíciles de quitar en post-proceso, son detectables cuando la diferencia de luz es máxima entre primer plano y fondo. Tienen forma de tintes verdosos o auras violetas que aparecen muy levemente en reflejos de objetos brillantes o en los ramajes de los árboles al revelar un archivo RAW sin supresión automática de aberraciones cromáticas. Al activar la función de corrección, desaparecen en su gran mayoría y apenas se pueden distinguir cuando ampliamos la imagen al 100%.
No se puede decir lo mismo del Fujinon XF 23mm F1.4 R, ni del XF 23mm F2 R WR y mucho menos del Viltrox XF 23mm F1.4, todos ellos amenazados en mayor medida por aberraciones cromáticas longitudinales que en ocasiones son imposibles de eliminar sin un proceso de edición complejo. En reportajes profesionales, conseguir de serie una imagen lo más limpia posible es crucial para perder menos tiempo en el cuarto oscuro digital.
Viñeteo y distorsión
Hice varias fotos a unas estructuras lineares que tengo en casa y revisé varios RAWs con la corrección de perfil desactivada. No tardé mucho en llegar a la conclusión de que el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR continúa el buen trabajo de sus hermanos XF 18mm F1.4 WR y XF 33mm F1.4 a la hora de corregir ópticamente la distorsión geométrica de la imagen. A decir verdad, nunca ha sido un problema importante en ninguno de los objetivos de 23mm con autoenfoque para la Serie X.
Del viñeteo podemos decir que es uno de los pocos puntos donde el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR no saca el examen con nota alta. Aunque un oscurecimiento en las esquinas de aproximadamente paso y medio no es para rasgarse las vestiduras, es un poco molesto el hecho de que el defecto se mantiene en casi medio paso al cerrar el diafragma. Por supuesto, este viñeteo es perfectamente subsanable en el postproceso, pero siempre a cambio de una mínima cantidad de ruido adicional en los bordes al compensar la exposición.
Bokehlicioso
¿Y qué hay del bokeh? Por regla general, cuando traspasamos la línea de la distancia focal estándar hacia terrenos más angulares, los fondos tienden a mostrarse más bruscos y las luces pierden su circularidad a medida que se alejan del centro.
Más allá de las obligadas nueve hojas de la abertura circular del diafragma para generar un desenfoque cremoso, se ha hecho un trabajo óptico específico para combatir el coma y la deformación de los círculos de luz en las esquinas, a la vez que se minimiza los rebordes de color en las zonas más contrastadas del fondo.
La promesa de Fujifilm es cumplida sólo parcialmente. Debido sobre todo al viñeteo del objetivo, se produce algo de deformación de la circularidad de los puntos de luz desenfocados en los bordes. Nada preocupante, al menos para mí. Lo realmente importante es que no existe nerviosidad en los patrones del fondo desenfocados más complejos, algo tan habitual en las fotografías capturadas con objetivos más angulares que el 35mm en APS-C. El bokeh es cremoso, sereno y sin estridencias para lo bueno y para lo malo, ya que siempre habrá expresionistas fotográficos en busca de un bokeh con más “carácter”.
Construcción del objetivo: un cañón sellado
Quizá «cañón» sea la metáfora más adecuada que me viene a la mente al pensar en el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR, sobre todo al compararlo con el Fujinon XF 23mm F1.4 R. El objetivo original recibía el apelativo cariñoso de «cabezón» entre varios parroquianos fujistas: no demasiado largo pero bastante obeso en sus formas y con un diámetro de filtro de 62mm. En cambio, aunque el nuevo modelo rebaja su anchura considerablemente y utiliza un diámetro de filtro de 58mm, aumenta peso y longitud más de un 20%: 77.8mm de altura y 375 gramos. Todo metal.
Y no podía ser de otro modo: el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR incorpora un sellado contra polvo y salpicaduras en 11 juntas del barril, lo que permite operar a temperaturas de hasta -10 ºC.
Ergonómicamente me parece un objetivo largo para mi Fujifilm X-T30. Es fácil acostumbrarse a utilizarlo porque el desequilibrio entre cuerpo y óptica no es tan grande, pero encuentro la experiencia cervical menos disfrutable para fotocallejeos largos en comparación con un peso pluma como el Fujinon XF 23mm F2 R WR. Lo veo muy descompensado para una cámara sin agarre como la Fujifilm X-E4.
Son los usuarios de cámaras más rotundas como la X-S10 y la X-T4 los que encontrarán el balance de peso perfecto acoplando el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR. Mucho mejor repartido que con el XF 23mm F1.4 original.
Mejoras de usabilidad
La utilización de un motor linear (LM) permite un autoenfoque instantáneo pero es menos sutil en el enfoque manual que el motor paso a paso propio de los objetivos más pequeños. Para afrontar este problema en el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR, con una profundidad de campo tan pequeña a máxima abertura, se ha ajustado al máximo la precisión del mecanismo del aro de enfoque manual. Dentro de la línea Fujinon XF, nunca ha habido más sensibilidad en la detección de los movimientos de muñeca más ínfimos como en esta óptica y en el XF 18mm y XF 33mm F1.4 R LM WR que comparten estas novedades de diseño. Aunque habrá quienes me crucifiquen por decirlo, cada vez noto menos diferencia con enfocar manualmente con un objetivo puramente mecánico.
Por otra parte, se vuelve a incorporar el botón de bloqueo de abertura (A), también presente en el Fujinon XF 18mm F1.4 R LM WR. Un control manual muy útil para disparar en modo de prioridad a la velocidad sin temor a que el aro de diafragma “baile” a f/16. Lo que se echa en falta es el mecanismo de empuje del XF 23mm F1.4 original para pasar a enfoque manual de manera muy sencilla.
Como último apunte hay que mencionar un detalle aparentemente insignificante pero que supone una alegría para un maniático de la limpieza de objetivos como un servidor: los jefes de diseño de ópticas se han dado cuenta que el relieve de los aros de control de los objetivos son una trampa atrapa-polvo. Para afrontarlo, se han espaciado un poco más las estrías y así favorecer la limpieza. Se nota porque ahora se ve el fondo debajo de las estrías. Pasar un pincel de limpieza me parece más efectivo que con otras ópticas Fujinon XF más veteranas a las que he sometido recientemente a una limpieza minuciosa.
Autoenfoque en 0,04 segundos
Si había una característica urgente de renovación de los nuevos objetivos con respecto a los modelos más antiguos, esa era la actualización del sistema de autoenfoque. No tanto en el rendimiento con el autoenfoque simple con buena iluminación sino en situaciones de luz más complicadas y a la hora de fotografiar motivos en movimiento. Al igual que en el Fujinon XF 18mm F1.4 R LM WR y el Fujinon XF 33mm F1.4 R LM WR, se ha elegido un motor linear, habitual de los zooms con elementos más pesados. Esto ha sido posible a través de la optimización del grupo de lentes encargado del sistema de enfoque situado en la parte central del objetivo.
Se ha tenido en cuenta al máximo la optimización del objetivo para vídeo con el control de una respiración del objetivo que se ha reducido al 0,011%. Esto significa que no se darán cambios de distancia focal al ajustar la distancia de enfoque, algo que puede arruinar algunas tomas usando ciertas ópticas con una profundidad de campo muy baja.
Según Fujifilm, el nuevo Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR consigue capturar el foco hasta en 0,04 segundos con una cámara de última generación como la Fujifilm X-T4. Mi experiencia corrobora que, a diferencia del Fujinon XF 23mm F1.4 R, no hay temor que el enfoque se vaya al fondo de vez en cuando, ni que dude demasiado cuando la luz escasea o que se quede atrás siguiendo a sujetos demasiado rápidos.
El Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR da paz mental absoluta porque hace su trabajo impecablemente en todas las situaciones con el autoenfoque simple (AF-S) y con el autoenfoque continuo (AF-C) con luz adecuada. Las dudas aparecen sólamente en seguimientos de autoenfoque con los escenarios más oscuros y estoy seguro que será algo en que veremos mejoras significativas con las posibilidades que traiga el procesador actualizado de la futura Fujifilm X-H2.
Alternativas al Fujinon XF 23mm F1.4 R WR
El Fujinon XF 23mm F1.4 R original es un objetivo notable a pesar de los años a sus espaldas. Es muy nítido a partir de f/2 y se defiende muy bien a máxima abertura, aunque a f/1.4 peca un poco de falta de contraste cuando la luz golpea de frente y flojea mucho con las aberraciones cromáticas axiales al rodear con halos de color los desenfoques más marcados. A pesar de que sigue siendo uno de mis objetivos favoritos, su rango de precio no se corresponde con la cifra que podíamos esperar con el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR soplando en la frente. Si lo encontramos rebajado en alguna oferta, sigue siendo una compra más que recomendable en el caso de que un autoenfoque de última generación no sea tu mayor prioridad.
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Similar en características, pero mucho más barato y más pequeño. En el caso de que seas capaz de sacrificar un paso de luminosidad, el Fujinon XF 23mm F2 R WR es tu objetivo. Eso sí, adolece de algunos problemas con el viñeteo (compensado por software) y un punto menos de nitidez en los objetos enfocados a corta distancia.
El Viltrox 23mm F1.4 es la recomendación si buscas el mejor rendimiento en relación calidad/precio. Es menos nítido que el XF 23mm F1.4 WR en las esquinas y enfoca algo menos suelto en AF-C. Su mayor punto débil es el control de los reflejos que el Fujinon maneja a las maravillas. Sea como sea, se puede encontrar a una tercera parte del precio de la nueva propuesta de Fujifilm. Es cuestión de prioridades…
Conclusión
Es fácil sacar conclusiones con un objetivo tan redondo como el Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR:
- Si eres fan de la distancia focal de 23mm en APS-C, quieres el mejor objetivo y puedes permitirtelo, cómpralo.
- Si utilizas muy habitualmente la distancia focal de 23mm en APS-C y buscas relación calidad/precio, considera comprar este objetivo porque, a pesar de su coste, es una inversión que amortizarás de sobra durante los próximos años.
- Si ya tienes el Fujinon XF 23mm F1.4 R y no has tenido queja por su autoenfoque ni por falta de nitidez y contraste a máxima abertura, posiblemente no necesites este Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR.
- Si el 23mm es una distancia focal más secundaria para ti y tienes un presupuesto limitado, considera el Viltrox 23mm F1.4 como opción.
- Si la portabilidad es todo para ti, el Fujinon XF 23mm F2 es un objetivo con unas prestaciones similares y un gran recorte en peso, dimensiones y precio.
👎🏽 Lo que menos me ha gustado
- De las cosas que no me gustan he de mencionar precisamente la portabilidad del Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR. Era necesario aumentar peso con más lentes y juntas para diseñar una nueva versión del 23mm F1.4 incorporando sellado y una calidad óptica a la altura de sensores de más alta resolución. Sus 375 gramos doblan al peso del Fujinon XF 23mm F2 R WR y aumentan en 25% al del Fujinon XF 23mm F1.4 R.
- Por otra parte, su precio de 949€. El coste es alto y en el momento de su anuncio me parecía poco inteligente por parte de Fujifilm pedir tanto por este objetivo, a pesar de ser un precio similar al XF 23mm F1.4 de primera generación. Sin embargo, tras probar en profundidad la perfección óptica del Fujinon XF 23mm F1.4 R LM WR, no tengo dudas en afirmar que su relación calidad/precio es alta.
- El viñeteo es algo más alto de lo esperable.
- En cuanto a la construcción, se echa de menos el práctico mecanismo de empuje con el aro de enfoque del XF 23mm F1.4 para pasar a modo de enfoque manual.
👍🏽 Lo que más me ha gustado
- Este Fujinon XF 23mm F1.4 a nivel óptico es una bestia: es nítido de esquina a esquina en todo el rango de diafragmas, libre tanto de distorsión como aberraciones cromáticas y con un bokeh delicioso. Me parece imposible de superar.
- El autoenfoque es tan tremendamente efectivo como puede ser el combo de procesador y sensor de cuarta generación de la Serie X. Solo duda cuando la luz cae mucho y estoy seguro que se darán varios giros de tuerca al rendimiento con escenarios de iluminación complicados en cuanto llegue el próximo relevo generacional de cuerpos en Fujifilm.
- La construcción es metálica, el sellado “WR” aporta tranquilidad sobre la durabilidad del objetivo y se ha encontrado el punto perfecto de resistencia de los aros de diafragma y enfoque.
- Estéticamente es posiblemente el 23mm con autoenfoque más bonito para la montura X.
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Especificaciones principales
Esquema óptico | 15 elementos repartidos en 10 grupos (incluye 2 elementos asféricos y 3 de dispersión extra-baja ED) |
Ángulo de visión | 63,4° |
Abertura máx. | F1.4 |
Abertura mín. | F16 |
Control de aberturaNúmero de hojas:Tamaño de paso | 9 (abertura del diafragma redondeada)c1/3 EV (22 pasos) |
Gama de enfoque | 19 cm – ∞ |
Ampliación máx. | 0,2x |
Dimensiones externas: Diámetro x Longitud | φ 67 mm x 77,8 mm |
Peso (aprox.)(sin tapas ni parasoles) | 375 g |
Tamaño del filtro | φ 58 mm |
Última actualización el 2024-11-20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
No es justo Jon hace un mes me recomendaste el Viltrox 23 f/1.4 y ahora sacas esto, jejejeje. Gracias por tu trabajo como siempre.
Teniendo como tienes una X-E2S te recomiendo una y mil veces de nuevo ese Viltrox 23mm F1.4. Con 16 megapíxeles el rendimiento del objetivo chino es sobresaliente y la diferencia de autoenfoque con el XF 23mm F1.4 WR no debería ser tan relevante como en una cámara de última generación.
Buena review
Si, buen análisis pero sigue siendo muy caro. Espero un Sigma 23 f1.4 y mientras tanto con el Fuji 23 F2.0 nos vamos apañando.
Se agradecen las reseñas donde se muestran buenas fotos con el análisis técnico. Ahora esperamos tus reseñas de los Sigma para Fuji 😉
Gracias, Claudia. Como diría áquel: estamos trabajando en ello 😉
También podemos apañarnos con el viltrox jeje.
Un respeto: el Viltrox es más que un simple apaño 🙂
Seré raro.
Pero me gustaría un 27mm F1.4 como los de esta hornada.
A mí personalmente siempre me ha parecido una focal rara… Pero los fans del Fujinon Xf 27mm F2.8 R WR son legión así que, ¿por qué no? 😀
Buenas Jon, gracias por esta excelente review.
Lo que no me queda muy claro es, cuando comentas en las conclusiones positivas del 23 f1.4 wr y las «similares» prestaciones del f2.
¿Tan parecidas son, salvo en nitidez, un paso de luz y autoenfoque?
Gracias de antemano.
José: no sé cuál es tu duda. Evidentemente, en cuanto a «prestaciones», si consideramos la nitidez y el autoenfoque ya tenemos una buena cuota de «similitud». Hay más cosas a considerar a favor del Fujinon XF 23mm F1.4 R WR, como la calidad del bokeh, el mayor contraste a distancias cortas de enfoque, mejor resistencia a los contraluces… Si tienes una pregunta concreta, coméntala 🙂
Hola he leido este review y esta muy completo
yo he adquirido este lente para mi Xt4 y estoy supercontento con los resultados recibidos
en el pasado tenia la 16 f1.4 y pensaba que era la mejor lente gran angular pero la nueva 23 f1.4 la pasa largo
yo la uso para foto nocturna y arquitectonica
la recomiendo en forma rotunda