“Different breed”: ese es el eslogan elegido para presentarnos a la Fujifilm X-Pro3. Viene a significar algo así como “de una pasta diferente”. ¿Te suena? Es el argumento repetido hasta la saciedad por marcas de coches, de ropa o de bebidas energéticas, ese que te convence que adquiriendo un producto eres alguien especial…
👉🏼 Actualización de enero de 2021: aquí tenéis la definitiva review de la Fujifilm X-Pro3 tras casi dos meses de uso.
Con el vídeo de introducción a la X-Pro3, Fuji atacó el sentimentalismo de los representantes de los medios citados en Barcelona para la puesta de largo de la cámara. La cosa se resume tal que así: la X-Pro3 es una cámara fiable, que ofrece una calidad de imagen soberbia y tiene un parque de ópticas imponente, pero no es un gadget de medio pelo. Es la Cámara elegida para el Fotógrafo -sí, ambos con mayúsculas- el que persigue ese momento decisivo, el que intenta plasmar la realidad en sales de plata el sensor de manera íntima, a través del visor lateral, sin distracciones superfluas como pantallas de consulta constante. Y qué mejor que un bloque precioso de titanio para materializar tu sueño húmedo, ¡oh, fotógrafo elegido! Tú, imbuído por el espíritu de Frank Cappa, Walker Evans y Vivian Maier, todos arrejuntados…
¿Cómo podría digerir el manejo de una cámara con la pantalla al revés, con lo habitualmente que yo la uso?
Sí, lo piensas racional y fríamente y suena ridículo. Simplemente no puede ser funcional ni serio el presentar al mercado una cámara con una pantalla “capada”. Yo entendía que muchos fotógrafos veteranos, con amplio bagaje en el trasteo con películas y líquidos reveladores y fijadores y todas esas cosas por las que pasé de manera demasiado fugaz, se iban a volver locos con este concepto. Y con un buen motivo… Por otro lado, sabía de las reticencias -por decir algo suave en la mayoría de los casos- de muchos usuarios de las X-Pro1 y X-Pro2 que no simpatizan especialmente con el concepto de pantalla de la nueva cámara. Y aún con toda mi confusión sobre el asunto, creía sinceramente que esta X-Pro3, no sólo pseudo-telemétrica sino también ahora pseudo-carreteril, era un movimiento valiente de Fujifilm en un intento de diferenciar líneas y de ofrecer algo diferente sin similitudes (dejando a Leica en un plano totalmente aparte) en el resto del mercado. Pero no, leñe, que esta cámara no podía ser para mí. ¿Cómo podría digerir el manejo de una cámara con la pantalla al revés, con lo habitualmente que yo la uso?
Efectivamente, la presentación de Fuji me hizo sentir un tanto “impío de la fotografía”. Un sentimiento de culpa que se vio reforzado a la hora de la verdad, al salir a la calle cámara en mano. Por esas primeras 3 ó 4 veces que capturaba una foto que creía interesante y que al ir a revisarla me encontraba con el monitor con el cartoncillo virtual indicando que estaba disparando con la película Classic Negative (e ISO automático, dos puntos menos en el carné). Que para consultar la imagen tenía que ir a la otra ventanilla… En las dos primeras ocasiones cedí al impulso de abatir la pantalla y comprobar cómo había quedado la foto. A la tercera, ya pasé del tema y me centré en buscar el siguiente escenario. Quedé en paz con mi espíritu fotográfico pero, ya bromas aparte, la verdad es que pude exprimir y disfrutar mucho más los 30 minutos que me había reservado para, simplemente, pasear y afotar.
La Fujifilm X-Pro3 en la mano
Soy fan absoluto de la ligereza de la Fuji X-T30 pero me encanta la forma rectangular de la X-Pro3, sin la antipática joroba de las cámaras con visor central. Agarrar esta cámara de titanio transmite seguridad y robustez de una manera similar a sus antecesoras. El peso se mantiene prácticamente invariable con respecto a la X-Pro2.
A la hora de la verdad, el giro minimalista de la X-Pro3 no resulta tan trágico y tiene la ventaja de que su botonería es de manejo más lógico
He de decir que he utilizado una X-Pro2 en apenas 2 sesiones en el último año, por lo que mis sensaciones comparativas no son las más precisas… Sea como sea, estuve utilizando la cámara durante varios meses después de su lanzamiento al mercado, por lo que puedo decir que estoy familiarizado con la línea X-Pro. Y, más allá de la evidente transformación de su pantalla, lo que más me preocupaba era la eliminación del D-Pad. ¿A dónde se ha ido la cruceta direccional? Tantos años de lucha para conseguir una buena cantidad de botones Fn y, de repente, reconvierten la X-Pro3 al minimalismo. El cómodo reposo de mi pulgar en el espacio vacío no bastaba como consuelo a la hora de pensar: ¿tendré mi acceso directo para el cambio del modo de AF, del tipo de obturador, nivel electrónico de dos ejes…?
A la hora de la verdad, el giro minimalista de la X-Pro3 no resulta tan trágico y tiene la ventaja de que su botonería es de manejo más lógico y que deja una parte trasera menos recargada. Todo depende de las pretensiones del fotógrafo que empuña la cámara pero, en mi caso, tuve suficiente configurando los dos botones Fn “en blanco” (en la parte superior y cerca del reposo del pulgar) y el botón AF-L/AE-L para albergar las funciones comentadas en el anterior párrafo. Con la X-T30 aprovecho las Touch Functions para configurar cosas como la conexión inalámbrica y los controles de detección de rostros, pero eso ya son cosas de las que puedo pasar. Podría haber asignado al botón delantero o el botón Q (con la X-Pro2 este botón no es configurable) pero tampoco dediqué mucho más tiempo a “tunear” una cámara que iba a usar 45 minutos.
Nunca he soportado el dial ISO empotrado de la X-Pro2 y, aunque su diseño parece no haber cambiado con la X-Pro3, agradezco enormemente la incorporación de un modo “C” para cambiar la sensibilidad ISO con el dial delantero. Poco más que añadir en cuanto a la botonería… un compañero indicó que el obturador de la cámara tenía más recorrido hasta hacer el click completo y supongo que eso tiene que ser un cambio a mejor para evitar pulsaciones accidentales.
El visor híbrido, ese gran patrimonio de Fuji
Lo he dicho ya en análisis anteriores: la madurez de los visores electrónicos de las cámaras actuales es tal que el margen para sorprendernos con paneles de mayor resolución y tasa de refresco es cada vez más pequeño. El visor electrónico de la X-Pro3 tiene un 30% más de resolución (3,69 millones de puntos) que mi X-T30 y, aunque pueda vivir sin ello, se nota sobre todo a la hora de enfocar pequeños detalles. En cuanto a la tasa de refresco, la Fuji X-Pro3 alcanza los 100 fps de la actual generación de cámaras, frente a los 85 fps de la X-Pro2.
Del visor electrónico podría decir que es como el de la X-T3 pero más “abarcable”.
En la calle, usar tanto el visor híbrido de la X-Pro3 en su cómoda posición lateral es una auténtica gozada. Del visor electrónico podría decir que es como el de la X-T3 pero más “abarcable”. A mí me pasa que con visores tan grandes tengo que recorrer demasiado la mirada para ver algunas escenas. El de la X-Pro3 me es ideal, claro, nítido, sin lag. Del visor óptico poco os diré, porque no es algo que he usado habitualmente salvo para hacer las pertinentes pruebas. La primera impresión es que es similar a la X-Pro2, con más ángulo… Se echa de menos la posibilidad de dar una magnificación extra en el visor óptico para usar cómodamente objetivos de focal más larga, pero parece ser que esta omisión de lentes ha permitido dejar más espacio para las mejoras del visor electrónico. Más allá de este sacrificio, Fujifilm afirma haber mejorado el esquema óptico de este visor, por lo que me parece un movimiento adecuado.
Afrontando el uso de la pantalla “oculta”
Mucho se ha achacado a la Fujifilm X-Pro3 que sea una cámara en la que el fotógrafo se tenga que adaptar a las peculiaridades de su equipo. Si hay algo en lo que destacan las cámaras de la Serie X -al menos las de gama media o alta- es que han alcanzado un nivel de personalización de su funcionalidad tan alto que pueden convertirse en una herramienta para cualquier tipo de fotógrafo. No es el caso de esta X-Pro3: hay tareas para la que esta filosofía de uso mínimo de la pantalla LCD no me parece práctico.
hay tareas para la que esta filosofía de uso mínimo de la pantalla LCD no me parece práctico
Pero para la fotografía callejera -e imaginando su uso para fotografía documental o de viajes– encuentro a la Fuji X-Pro3 una cámara más que adecuada. Al menos para mi forma de funcionar… ya os he contado mi vicio de consultar de manera compulsiva la fotografía después de tomarla y cómo la X-Pro3 sirve de terapia para centrarme en lo esencial. Sí, ése es el mensaje marquetinero de Fuji, pero en los 45 minutos de uso me ha funcionado. Y me he divertido más.
En la calle mi funcionamiento habitual es disparar básicamente con el visor electrónico y apoyarme en el uso de la pantalla abatible por encima de la cintura para fotos discretas. Más o menos un 75%-25%. Es por eso que para mí la Fuji X-Pro3 va genial para street photography: el visor es magnífico y el mecanismo para abatir la pantalla en 90º es más sencillo que el resto de cámaras articuladas, ya que no implica un giro de muñeca pronunciado para dejar el ángulo bien dispuesto.
Mejoras en el autoenfoque
El hardware de mi X-T30, sin contar la memoria del buffer, es esencialmente idéntico al de la Fujifilm X-Pro3: sensor X-Trans 4 y procesador X Processor 4. No obstante, el firmware de esta cuarta generación de cámaras sigue refinándose y los de Fuji afirman que la sensibilidad del autoenfoque por detección de fase de la X-Pro3 pasa de los -3EV a los -6EV, lo cual significa que responde de manera excepcial en situaciones de luminosidad muy escasa.
Por lo que he experimentado, estos avances del autoenfoque también están mínimamente presentes a la luz del día. Hay momentos fugaces durante el paseo fotográfico en los que toca hacer “de pistolero” encuadrando y disparando de manera casi instintiva. Cuando el sujeto a fotografiar está en movimiento sé de buena tinta que, disparando de manera tan apresurada, hay un ratio de acierto más bien bajo. Con la X-Pro3 he tenido la sensación de que la cámara es más segura a la hora de enfocar en estas ocasiones, al menos las clavé casi todas… Me arrepentí de no haberme llevado un objetivo como el XF 35mm F1.4 R para acoplar al cuerpo un hueso más duro de roer que XF 23mm F2 R WR, una comprobación pendiente para cuando pueda probar la cámara con más tiempo. Espero que eso sea antes de que lleguen las actualizaciones de firmware con las mejoras de autoenfoque a la X-T3 o X-T30. Llegarán más temprano que tarde, que no os quepa duda.
El encanto del Superia (Classic Negative)
Uno de los mayores aciertos de Fuji es incorporar por fin una simulación de Superia, una de sus películas más populares. Por alguna razón, no han querido aprovechar su propia marca y han denominado al nuevo modo de simulación de película “Classic Negative” (Classic Neg). No obstante, los colores emulan claramente esa película baratuna con tonos que resultarán familiares a muchos que hemos vivido la fotografía química como jóvenes con réflex de segunda mano y un presupuesto muy limitado para carretes.
Os dejo con una galería capturada exclusivamente con el modo de simulación Classic Negative, sin retoque de colores y con todos los ajustes de imagen a “0”. Los verdes son especialmente profundos y los rojos tienen una calidez que, a mí al menos, me resulta muy atractiva.
Conclusión preliminar
La Fujifilm X-Pro3 es una cámara de nicho que alegrará la práctica fotográfica de los usuarios más clásicos, aquellos que añoran la simplicidad de las cámaras de carrete y quieren una herramienta que sea básicamente un visor, tres o cuatro controles y menos zarandajas. Centrarse en componer y disparar, produciendo JPEGs de calidad y más personalizables que en muchos casos hagan prescindible el paso por el (para muchos tedioso) proceso de revelado RAW.
Creo que es la cámara que más relación amor/odio está generando entre la comunidad fujista y eso es debido a que hay muchos usuarios de la la X-Pro2 que la han utilizado de manera más “generalista” y no se sienten identificados por esa filosofía de utilización de la pantalla tan restrictiva de su sucesora. Por otro lado, muchos fujistas se felicitan de que Fujifilm se arriesgue a lanzar al mercado un producto diferente, con carácter, dejando un poco de lado la carrera tecnológica a la que estamos acostumbrados.
Está por ver cuántos caen en el enamoramiento de su particular diseño y uso para afirmar que a Fuji le ha salido bien apostando por ser «different breed», o si el mercado acaba juzgando a la Fuji X-Pro3 como una cámara snob, poco funcional o excéntrica. Por mi parte, no me considero parte de su público objetivo, pero -si estuviera más sobrado de pecunio- adquiriría gustoso la X-Pro3 como segundo cuerpo. Reconozco que ardo en deseos de tener de nuevo esta cámara de nuevo para hacer una prueba más exhaustiva y, de paso, volver a perderme por las calles de la gran ciudad disfrutando de sus inspiradoras formas, un visor único y los evocadores tonos del Classic Negative.
La mejor review que he leido de la xpro3.
Es un placer leer tus análisis Jon, no sé por qué no te prodigas más. Me encanta tu estilo. A mí me has picado el gusanillo y pensé que no querría saber nada de esta nueva Pro.
Una pregunta: ¿has comido patatas fritas o algo aceitoso mientras usabas la cámara? Lo digo porque tiene un acabado un poco sucio xD
Iba con las manos lavadas con jabón en el baño, ¡palabra! 😀 Has hecho una observación muy oportuna: ¡la versión DURATEC black se ensucia con la mirada! se quedan las huellas dactilares en la superficie con facilidad y hay que ser muy meticuloso para limpiarlas.
Gracias por tus ánimos. Este año voy a estar más activo en cuanto a reseñas 🙂
No me interesa nada la cámara pero después de leer los primeros párrafos me he leído el artículo hasta el final. Buen trabajo!! Vas a hacer una review del 16-80 mm?
Tengo muchas ganas a ese 16-80mm, mi objetivo favorito cuando usaba Nikon APS-C (16-85mm) y Sony réflex (CZ 16-80mm). Mi forma de fotografiar ha cambiado mucho desde entonces y suelo tirar más de ópticas fijas, pero me apetece ver el resultado de un reencuentro. Estoy seguro que pronto os puedo contar algo.
Es complicado quitar las manchas? Es lo unico que me echa para atrás….
¡No, hombre! Complicado no es, tan sólo hay que hacer una pasada de paño más energética 😀 Yo no soy maniático para esas cosas, pero entiendo que haya gente que le pueda sorprender para mal. Lo mejor es que encuentres la forma de probar la cámara antes para descubrir si eres de esos… De todas formas, esta «ensuciabilidad» es exclusiva de los modelos DURA. Con la X-Pro3 negra «normal» no pasa.
Menudo artículo interesante, muchísimas gracias!
Para mi, lo decisivo es que Fuji parece obligarnos a renunciar a la pantalla trasera, mientras que con la Pro2 (y todas otras X), decidimos nosotros…
Esa es la gran (des)gracia de la cámara. No voy a defender esa característica de la X-Pro3 porque está claro que no es funcional para una generallidad de fotógrafos. Lo cierto es que, como en muchos momentos y aspectos de nuestra vida, a veces necesitamos unos límites tangibles que nos guien a alguna parte… A mí me ha servido, ayudado e inspirado este límite durante una sesión concreta. Que sea extensible a otras sesiones más críticas de mi práctica fotográfica, pues lo dudo… Pero no lo podré decir claramente hasta que haga una prueba más profunda de la cámara.
Leí hace muchos años, antes de la era digital, un articulo titulado: “¿los fabricantes hacen las cámaras que deseamos? Para mi, evidentemente no, era aquello de ir introduciendo novedades como argumento de ventas.
Mi sueño siempre ha sido un cuerpo analógico con un dorsal digital, pero por ilogico que pueda parecer, nunca se ha hecho salvo en algun caso de formato medio con precios desorbitados. Algo tan sencillo no se ha ofrecido nunca, nuevamente motivos de marketing.
Esta Fuji x-pro3 ofrece algo tan sencillo como seductor que es meterse dentro de la camara y olvidarse de los controles mas allá de los que aparecen en el visor, centrarse completamente en la escena y actuar instintivamente.
Me sobra incluso la pantalla desplegable, si sales con Velvia i un 35mm, sales a experimentar con eso, si vas cambiando no puedes centrate en lo que haces.
El no ver los resultados hasta llegar a casa forma parte de la mágia y de la motivacion para volver a salir.
Es una camara para disfrutar de la fotografia, no para ir a buscar la foto perfecta, el placer esta en el camino, no en llegar.
Este es el mejor artículo sobre la x-pro3 que he leído, felicidades.
Jordi, yo he crecido fotográficamente en la era digital y mi sentir es menos «espiritual». Tenía mis reticencias serias con este nuevo modelo pero la verdad es que me ha hecho sentir esa «magia» durante media hora de afotamiento. Supongo que tiene que ver también con que llevaba mucho tiempo sin experimentar el placer del fotocallejeo, pero creo sinceramente que algo ha tenido que ver el adaptarme durante esa sesión de prueba a la filosofía -sea impuesta o no- de Fuji y su X-Pro3. Estoy seguro que tú la vas a disfrutar aún más si tienes oportunidad de probarla en tu salsa.
A mí me falta la pasta para comprármela .El bussines es el bussines pero cada día las marcas te venden cámaras con MENOS aditamentos por MÁS dinero ,eso es minimalísmo snob.Para cuando una cámara sin video ,que a mí me sobra y que te hagan mejor precio por no tenerlo? .
Estoy cansado de tantos botones,menús ,etc…Me quedaría con el triángulo de exposición,velocidad ,diafragma e isos,y puntos de enfoque,y todo lo demás sobra ,solo sirve para entrenerse y no estar disparando fotos .de ahí que me guste algo más el camino que lleva fuji con la estética y filosofía de esa cámara ,como me gustaba la ya olvidada Nikon F .Pero sigo con la misma retórica ,si quieres ese poco ,tienes que pagar más que el resto de los mortales .Pues para eso que me den el menú completo que ya me encargaré de comer lo que me apetece y desechar el resto ,que encima pagaré menos .
La cuestión es que el mercado pide mayoritariamente mejoras en el vídeo y, a la hora de desarrollar el firmware para un combo sensor + procesador, hay una inversión de investigación y desarrollo que van a acabar pagando todas las cámaras de esa generación. Fuji (ni ninguna otra marca) tendría menos costes (o al menos nada especialmente significativo) por quitar el vídeo de ningún modelo.
Por otra parte, hay que decirlo bien claro: la X-Pro3 es una cámara que en mmi barrio llamaríamos «pija», y detalles como el titanio están destinados a satisfacer el paladar fino de su público objetivo. Detalles que como otros artículos de lujo, disparan el precio de manera exponencial.
¿Podría haber una X-Pro3 de construcción más «popular»? A mí me entusiasmaría… pero viendo un poco el mercado, creo que estaría destinada al fracaso.
Quiza en Fuji se sorprenderian del éxito de una fuji fm2, a un precio más ajustado, con el sistema de simulación de películas de esta x-pro3 y el visor electrónico …y nada más, ni video ni programas que al final no hacen mas que decidir por nosotros una cosa tan simple como la selección de una abertura de diafragma y una velocidad de obturación.
Pero es lo que decia en mi comentario anterior, los fabricantes hacen las cámaras que les interesa a ellos y luego las presentan como si fuera lo que nos interesa a nosotros.
Debo decir, sin embargo, que actualmente Fuji es el fabricante que más se acerca a los deseos del fotógrafo.
Ese sería un concepto de cámara muy «de nicho». Y esas cámaras tan especializadas nunca son de preciomás ajustado, sino todo lo contrario…
Puestos a sorprender, a este cuerpo le hubiera añadido un sensor cuadrado completando hacia el FF, un pseudo formato medio que no creo que llegue nunca… Por cierto, yo intercambiaría las ruedas de compensación y la de velocidad en todas las Fuji ¿todo el mundo usa más la compensación de exposición?
Sdos.
El único que puede innovar en cuanto a sensores es Sony. Fujifilm no diseña la base de los sensores y no podría plantearse algo así.
Jon, leí por algún lado –en el móvil, luego no encontré al ordenador– que probaste la X-Pro3 con un objetivo que considerabas rápido hasta en la X-Pro1. ¿Estoy loco o es el 23mm f2? Es que ahora lo busco y lo rebusco y no hay manera de dar con la frase esta…
Esta es la única referencia que he hecho al XF 23mm F2 en este artículo o en el foro: «Me arrepentí de no haberme llevado un objetivo como el XF 35mm F1.4 R para acoplar al cuerpo un hueso más duro de roer que XF 23mm F2 R WR, una comprobación pendiente para cuando pueda probar la cámara con más tiempo».
Considero que no hay objetivos que pueda considerar «rápidos» para la X-Pro1, salvo en condiciones de muy buena luz. Esta cámara sólo autoenfoca por contraste y ni los objetivos más recientes son capaces de funcionar con gran soltura a poco que la luz o el contraste de nuestro sujeto escaseen.
Uno más que se apunta a ver esa review, porque es un objetivo de longitudes muy apetecibles para la genaralidad.
Gracias por este trabajo, aunque yo de momento con una XT3 recien estrenada dudo que vaya a por la Xpro3.
Saludos
No sé a qué review te refieres, ¿hablas del XF 16-80mm F4 que comentan más arriba?
Pues entonces estaré mezclando opiniones que leí aquí y allí… eso pasa por leer en el móvil! Y sí, la X-Pro1 es una gran cámara, pero el enfoque con (no muy) poca luz pone a la prueba la paciencia de cualquiera que se aventure a seguir usándola teniendo una X-T3… de todas maneras, buena review!
Gracias, Edgard 🙂
Lla X-Pro1 es una cámara del 2013 que salió con toda la tecnología de Fuji aún en pañales… Hoy en día las cámaras de gama más baja de la Serie X se comportan mucho mejor.
Efectivamente al 16-80 f4, que me atrae mucho por esos seis pasos de estabilización, pero que no termino de decidirme porque, en cuanto a calidad, todo lo que leo entra en contradicción dependiendo de donde venga.
De nuevo gracias por tu trabajo y por esa review del 16-80 si por fin la realizas.
Saludos
Hola X Pro-3. Larga vida a mi X Pro-2.
Entretenida review.. Saludos.
Hola Jon, desde su presentación he visto un montón de reviews sobre la xpro-3, pero en ninguna aparece sobre un trípode. Alguien lo ha probado??? Se puede trabajar bien con la pantalla LCD abierta??? me refiero si se puede abrir cerrar sin problema?? puedes usar el doble nivel?? mil gracias
El nivel electrónico de doble eje está presente de la misma forma que en los últimos modelos de la Serie X. No tuve tiempo de probar ni se me ocurrió el problema de la pantalla con el trípode… En este vídeo de DPReview hablan de su incompatibilidad con ciertas placas de liberación rápida, pero no debería ser un impedimento para usar la X-Pro3 con zapatas y rótulas «normales.»
Buenas Jon
Me gusta el enfoque y la frescura de tu review
Has transmitido sentimientos hacia un producto que quiere sorprender, y sorprende an ambos sentidos.
Buen trabajo
Se agradece mucho tu comentario David, y más viniendo de un miembro de nuestra comunidad tan activo y de opiniones tan sinceras hacia el sistema sobre el que marujeamos a diario. En este curso tendré tiempo a dar más caña a las reseñas 🙂
Más claro, agua… pero sí es verdad que los resultados que dan este pionero sensor X-Trans son muy buenos, y con un fijo como el 18mm f2 la cámara hace un conjunto casi tan compacto cuanto una X100 (eso sí, pesa muchísimo más). Tenía dos, vendí una y la otra, sin encontrar nuevo dueño, la tengo para tomas caseras y la verdad es que me tiene muy contento. Para trabajar, ni en sueños, pero para hacerle fotos a la enana cumple con creces.
Hola, enhorabuena por la review, como otros compañeros dijeron, de las reviews más sinceras e imparciales. Y es que no entiendo la frustración de la gente, como si se tratara de una traición por parte de Fuji… Y es que no me entra en la cabeza lo de estar cambiando de cámara cada poco. Cuántos vídeos y preguntas hay del tipo «si tengo la x-t3, merece la pena comprarme la x-pro3?» Alucino. Ya teniendo la x-pro2 tampoco entiendo pasarse a la x-pro3… Será que mi caso es muy distinto: vengo de una Canon 1000D comprada en 2010… y ha hecho de todo, y hablo de trabajos profesionales, y menos limitaciones puntuales, saliendo muy airoso.
También me sorprende la costumbre de revisar la foto recién hecha. Yo lo tengo desactivado. Sí es verdad que si es un trabajo importante miro las primeras fotos en un momento dado, pero… no lo hago cada poco.
Buscaba una cámara con visor óptico (el electrónico me hace daño a la vista… ¿No le pasa a nadie? Conozco solo 4 casos) y pantalla abatible para usarla como Rollei (así se fotografía de una manera muuuy distinta). De modo que sólo me tira para atrás el precio… pero bueno, iré a por ella con la ilusión de tenerla para toda la vida (podrá ser?)
Ah! Dos dudas a ver qué opinas, Jon: habrá packs de cuerpo+27mm o cuerpo+60mm? y relacionado con el 60…¿será difícil trabajar con este objetivo y el OVF? Un saludo a todos y enhorabuena de nuevo por el post.
Gracias por tu comentario, Reki.
¿Has probado a reducir el brillo del visor electrónico al mínimo para reducir esa fatiga visual? Supongo que no he pasado en ninguna sesión tanto tiempo mirando por el visor como para experimentar algo parecido…
En cuanto a lo de tener la X-Pro3 toda la vida… por poder, es posible. Al menos el titanio te facilitaría mucho la durabilidad física. La cuestión es que en la era digital os cambios tecnológicos hacen que una cámara quede obsoleta en unos cuantos años. Las «sin espejo» han alcanzado cierta madurez en sus tecnologías que reducen la espectacularidad de las mejoras en cada cambio generacional… pero creo que en 9 o 10 años tendrás argumentos sufcientes en el mercado como para querer cambiar de modelo, por muy comedido que seas en tus necesidades de uso (viniendo como vienes de una Canon 1000D).
La X-Pro3 se venderá inicialmente solamente con el cuerpo. Y previsiblemente en un futuro con el XF 23mm F2 R WR. No creo que sea difícil trabajar con el XF 60mm F2.4 y el visor óptico, salvo en tomas tipo macro. Supongo que sabrás del error de paralaje del visor óptico de la X-Pro3, ¿verdad?
«¿Para trabajar ni en sueños por qué?» No entiendo qué puedes necesitar que no te dé esta cámara.
yo creo que es una cámara para >50 que les gustan los clásicos. No veo un chaval de 20 o 30 años comprándose un trasto así. Por supuesto que dentro de este público «retro» y amante de lo clásico, será una cámara bienvenida. Hay mucha gente que detesta revelar RAW (en 2019…) y prefiere sacar un jpg directo de cámara y la verdad que como «anecdótico» que te muestre la emulación de película es… «gracioso?». No sé el término exacto para definirlo. Yo soy early adopter de toda tecnología y me encanta todo lo nuevo pero entiendo que haya peña más clásica y principalmente que no tenga ganas de trastear un RAW. En fin, una cámara ideal para el abuelo Simpson, que contaría sus batallitas con la fotografía química y «en mis tiempos…»
Saludos
Pues resulta que yo, que paso de los quince quinquenios, jamas tiro en jpg, y aunque mi XT3 haja unos jpg muy buenos, hiba a decir del c…o, considero que siempre se les puede sacar algo más a los RAW.
Tampoco entiendo tanta polémica con el tema de la pantalla, se supone que el que se compra una cámara de este tipo, y con los visores actuales, que te dan una información casi total de como quedará la foto, no es necesario andar pantallita arriba y abajo, pero si considero interesante que se pueda configurar para ver los parámetros de fotografia que se están empleando, no para ver el tipo de película.
En cuanto al cuerpo de titanio, esa palabra tan rimbombante que para el marketing está muy bien, seguro que no es 100% titanio, sino una aleación con aluminio que lo hace mas resistente y poco pesado.
Saludos
El error de paralaje… Me falta probarlo en persona, pero en lo que he visto en vídeos (y leído en el foro) parece que al pulsar el botón de enfoque, el visor calcula el encuadre real de la toma y lo muestra. Tras enfocar ya podría mantenerse ese rectángulo y no volver al primer encuadre «no-real», ¿no?
Bueno entiendo que será cosa de acostumbrarse e interiorizarlo.
Gracias por tu respuesta y hablarme del paralaje; llevo todos estos días dándole vueltas.
Saludos.
Tengo más de 50 añitos y en ningún momento se me ocurriría fotografiar sólo en jpeg, como tampoco se me ocurría llevar la T-Max 400 o la TRI-X a un centro comercial para que me sacaran copias en papel baritado. Así que RAW+jpeg. Normalmente el jpeg es bueno, pero si hay algo que mejorar ligeramente utilizo el RAW, que para eso está.
Por cierto, parece ser que la X-Pro3 permite sacar un Tiff a partir del RAW con el microprograma incorporado…
Tengo más de 50 añitos y en ningún momento se me ocurriría fotografiar sólo en jpeg, como tampoco se me ocurría llevar la T-Max 400 o la TRI-X a un centro comercial para que me sacaran copias en papel baritado. Así que RAW+jpeg. Normalmente el jpeg es bueno, pero si hay algo que mejorar ligeramente utilizo el RAW, que para eso está.
Por cierto, parece ser que la X-Pro3 permite sacar un Tiff a partir del RAW con el microprograma incorporado…
Pues yo he cumplido los 55 años, y a mí me parece una maravilla esta x-pro3. Cumple todos mis sueños analógicos, jaja…, menos en el precio. Es lo único negativo.